Ayer por la tarde tuvo lugar por el centro de Sevilla la «Marcha Blanca» sanitaria. Esta manifestación tenía como objetivo mostrar el absoluto rechazo de los trabajadores al proceso de fusión de hospitales que esta llevando a cabo el SAS entre los hospitales Virgen del Rocío y Virgen Macarena. Este proceso supone un recorte de prestaciones para los usuarios, así como modificaciones en las condiciones de trabajo de los profesionales. Además el proceso se está llevando a cabo de manera opaca, sin comunicar a los representantes de los trabajadores cual era el camino a seguir y qué modificaciones se llevarían a cabo. Este recorte se suma a los que ya sufre el sector sanitario andaluz. No quedan en el olvido los contratos a eventuales del 75%, o la supresión de la contratación de personal para cubrir plazas de profesionales que se jubilan.
La manifestación partió a las 19.00 horas de la Plaza de la Encarnación y finalizó a las puertas del palacio de San Telmo. Durante el recorrido la manifestación pasó por las puertas de la Consejería de Salud, en la Avenida de la Constitución, donde todos los sindicatos pidieron, de manera unánime, la dimisión de la Consejera, María Jesús Montero
¡No a la fusión hospitalaria! ¡No a los recortes en sanidad!