Durante el mes de noviembre y diciembre de 2016 los facultativos del Servicio de Cuidados Críticos y Urgencias del HAR de Écija no pueden tomar días de libre disposicióoacute;n porque se los deniegan aduciendo falta de sustitutos, a pesar de que solo piden días “fáciles de cubrir” es decir, laborables de lunes a viernes en general para distorsionar el servicio lo menos posible y fuera de la Navidad.
Esto solo ocurre en este servicio, que funciona cubriendo las urgencias y emergencias de la comarca mediante guardias de 24 horas porque en el resto las funciones pueden repartirse entre todos, cosa imposible donde hay que cubrir el hueco que deje uno para poder atender las urgencias.
La plantilla del SCCU del HAR de Écija está compuesta por 14 médicos que hacen, en grupos de 3, una guardia de 24 horas cada 4 días, con una media de 7 guardias al mes, y un tiempo de descanso de 3 días, entre guardias, que es el estimado como necesario para recuperarse y que no se afecte, a la larga, la salud.
De esa plantilla, un médico es además pediatra y ha sido asignado a la consulta de Pediatría; no hace guardias pero su puesto en la plantilla de urgencias no ha sido sustituido.
De los 13 que quedan para hacer guardias hay 6 eventuales; 2 que cubren bajas maternales y uno de ellos cubre, además, una reducción de jornada; otros 2 son sustitutos de dos compañeros de baja laboral. Y 2 eventuales están cubriendo reducciones de jornada, es decir, están contratados a tiempo parcial. La consecuencia, que es difícil tener 3 médicos diarios para cubrir las guardias de urgencias, aún fuera de las épocas de vacaciones.
La precariedad y cortedad de la plantilla y la absoluta falta de sustitución de las ausencias por cualquier causa provoca que todos suelan terminar el año con un exceso de horas sobre su jornada máxima anual sin que ello parezca importar mucho a la dirección, dada la reiteración. Tan es así que los contratados a tiempo parcial es raro que hagan menos guardias que los contratados a jornada completa, y a veces alguna más que ellos, a pesar de que esto no debiera suceder en ningún caso. Las protestas no han hecho que se les contrate a jornada completa y siguen siendo perjudicados tanto en tiempo como en base de cotización para el futuro.
En ocasiones se pide ayuda a las plantillas de otros HARES pero como la situación es semejante, es muy difícil encontrar quien cubra las guardias.
En definitiva, tienen que cubrir las guardias de compañeros ausentes, además de las propias; están sobrecargados de horas sobre su jornada máxima anual; tienen que cubrir guardias sin el descanso preceptivo entre ellas, el consiguiente cansancio crónico y la posible incidencia sobre la salud; en su caso, hacen muchísimas horas más que las marcadas en su contrato y están castigados permanentemente al no poder tomar días de libre disposición aún fuera de temporada de vacaciones. Y buscar sustitutos a última hora suele ser inútil y la excusa perfecta.
Los representantes sindicales del SMA-Sevilla han solicitado a la Agencia Sanitaria Bajo Guadalquivir que se realicen las gestiones oportunas para la efectiva aplicación de estos derechos y asegurar su cumplimiento sin obstáculos.
La solución debería ser una prioridad que, estamos seguros, la nueva directora del centro afrontará de inmediato, con acierto y todo el cariño hacia sus cansados profesionales. Aunque abrir la mano y soltar algunas “perras” necesarias para las contrataciones imprescindibles suene a blasfemia a los gestores económicos de la sanidad pública.