La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública ha publicado su Informe 2017 sobre “Los Servicios Sanitarios de las CC.AA”, el XIV ya, que tiene como objetivo evaluar las diferencias en los sistemas sanitarios autonómicos, partiendo de la base de que una gran diferencia en los recursos y funcionamiento de los servicios sanitarios conllevaría a la desigualdad en el acceso a la protección de la salud y, por tanto, a la vulneración de un derecho constitucional.
Los brutales recortes producidos desde 2009 de entre 15.000 y 21.000 millones de € se han evidenciado sobre todo en los recursos humanos disponibles, es decir, en los trabajadores sanitarios, y tanto en lo que respecta a su número como en el notable empeoramiento de las condiciones de trabajo. Y también en el funcionamiento de los servicios, especialmente en lo referido a las listas de espera: el 13,1 % de las personas que en 2009 pensaban que las listas habían empeorado han pasado al 28 % en 2016.
Las diferencias de puntuación entre comunidades, más de 41 puntos, expresa claramente la gran disparidad de servicios sanitarios entre ellas lo que pone en peligro la cohesión y equidad entre territorios.
Andalucía, que en 2009 era la 6ª Comunidad entre 17, ocupa ahora la 14ª posición, con la misma puntuación que Cataluña, pasando a ser considerada, por primera vez, una de las cuatro comunidades con los peores servicios sanitarios.
Andalucía es la Comunidad que menos gasta por habitante, que menos camas tiene y que menos TAC y RM hace a los pacientes. La que menos especialistas tiene por habitante y una de las 4 que menos médicos de familia tiene y con menos quirófanos en su hospitales.
La opinión de los ciudadanos también se ha hundido respecto a informes anteriores y así la valoración global de la Sanidad ha bajado a la penúltima posición y es la tercera por la cola en la valoración de su buen funcionamiento, la cuarta por la cola en el porcentaje de ciudadanos que eligen la sanidad pública para la hospitalización y la quinta por la cola en la satisfacción de los ciudadanos.
Navarra, La Rioja y País Vasco, las mejores, dedican a la Sanidad más de 1.600 € por habitante mientras que nosotros dedicamos apenas 1.100 y claro, eso se tiene que notar.