La población sevillana del Lora del Río está sufriendo, como otras tantas, la escasez de medios y profesionales sanitarios para atender a su población. Este mes de octubre ya ha visto cómo una mujer, tras una caída, permaneció en el suelo esperando a que llegara la ambulancia durante más de 40 minutos y que, al llegar desde Carmona, solo contaba con el conductor, por lo que tuvieron que acudir un médico y una enfemera que estaban en la zona para atender a esta ciudadana. ¿Caso aislado? ¿Coincidencia de desdichas? No lo parece: una semana antes de este incididente se produjo una colisión entre un coche y un ciclomotor cuyo piloto estuvo tirado en el suelo también 40 minutos antes de que llegara el DCCU.
Son nuevas muestras, como venimos informando desde hace mucho tiempo, de la escasez de medios y sanitarios de que disponen los municipios de la provincia, sobre todo ahora que los profesionales de los centros de salud tienen que atender las prioridades 1 y 2 (las de mayor riesgo) cuando no hay DCCU disponibles, como suele ocurrir. Y es que, sobre todo en el medio rural, cuanto estos equipos están ocupados atendiendo en una población y surge una urgencia en otra, puede suceder que a) tienen que acudir con una ambulancia convencional de traslados no equipada para este tipo de servicios; b) simplemente, puede ocurrir que no haya disponibilidad y se ven obligados a acudir con medios propios; o c), como ocurrió aquí, envían una ambulancia para recoger al paciente y trasladarlo, evidentemente sin personal equipo sanitario adecuado. Así es imposible.
Fuente: Europa Press