El Colegio de Médicos de Sevilla (RICOMS) y el Sindicato Médico de Sevilla, representado por su presidente, Rafael Ojeda, han celebrado una asamblea extraordinaria para informar a todos los colegiados que ejercen en la sanidad privada o mixta de las acciones a emprender en demanda de una actualización de sus retribuciones.
Esta iniciativa responde a las numerosas quejas y muestras de descontento que han hecho llegar al RICOMS los facultativos, preocupados por la falta de actualización en los honorarios retributivos por parte de las compañías aseguradoras sanitarias, lo que está repercutiendo en la seguridad de los pacientes y en la calidad de la atención ofrecida en el ámbito de la sanidad privada.
De esa forma, la institución colegial y la sindical han establecido un calendario de protestas que comenzarán el próximo día 23 de enero ante la falta de acuerdo por parte de las compañías aseguradoras hasta esa fecha. Además, el presidente del RICOMS, Alfonso Carmona, ha señalado que “espera recibir también el respaldo y el apoyo de los profesionales que trabajen en otras provincias andaluzas, sumándose también a estas movilizaciones”.
Carmona ha indicado la hoja de ruta a seguir, señalando que las primeras movilizaciones afectarán “únicamente a las citas en consultas de todas las especialidades y de todas las compañías, lo que excluye por completo a las intervenciones quirúrgicas, por el momento”. Además, ha explicado que “los servicios de urgencias funcionarán con total normalidad”.
RICOMS y Sindicato Médico de Sevilla han señalado que el objetivo que se persigue con esta jornada de protesta es “reclamar la actualización de unos baremos congelados durante tres décadas, fundamentalmente porque no se han tenido en cuenta los incrementos del IPC anual, lo que ha supuesto una pérdida del 145% de las retribuciones de estos profesionales, en un contexto además de insoportable y elevada inflación, aumento de los costes energéticos y del salario mínimo de los empleados”, tal y como ha explicado el presidente del RICOMS.
Además, ante la falta de acuerdo, desde el Colegio de Médicos de Sevilla y el Sindicato Médico de Sevilla han expresado la “confianza en el papel mediador de la Administración andaluza en este conflicto”, que no tiene otro fin que garantizar la calidad y la viabilidad de la asistencia sanitaria pública y privada en nuestra provincia y, en último término, en el conjunto de Andalucía.