La constitución del Observatorio de Agresiones a profesionales del SSPA la definimos con esa palabra, que según la RAE significa: “Que decepciona, que no responde a lo que se esperaba”.
Y las razones de esta valoración obedecen al escaso, por no decir nulo, compromiso de la consejera de Salud en dotar de una efectividad real a un órgano del que se anunció su creación en marzo de este año y que fijó su constitución para el 25 de septiembre.
Esperábamos que esta reunión fuese productiva, en el sentido de aportar propuestas y acciones concretas, para prevenir el incremento exponencial en el número de agresiones al que estamos asistiendo.
Se analizaron los datos de agresiones producidas en el primer semestre del año y los datos arrojan un resultado desalentador: las agresiones siguen sumando cifras.
Los perfiles siguen siendo los mismos: profesionales más agredidos Médicos, mujeres, trabajando en Atención Primaria, con un rango de edad entre 45 y 55 años y los agresores: hombres con un rango de edad similar, pacientes o acompañantes.
Los motivos siguen manteniendo la misma tendencia, totalmente injustificada, basando sus causas en demandas no satisfechas y discrepancias con la actuación de los profesionales.
Desde cada uno de los estamentos que fuimos convocados en la consejería: Cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, Colegios Profesionales, Sociedades Científicas, asociaciones de pacientes, Fiscalía y las Organizaciones Sindicales. Todos los presentes, incluidos el Sindicato Médico Andaluz , expusimos nuestras apreciaciones y aportamos ideas para intentar revertir esta lacra.
La Consejera, por su parte, insistió en la situación actual de demanda de inmediatez y resultados, a medida de sus deseos, por parte de la sociedad, en todos los ámbitos y que se traducen en una agresividad latente cuando no ve satisfechas sus demandas y se materializa en agresiones a todos los estamentos públicos: educativo, administrativo, cuerpos de seguridad y sanitario.
Por parte del Sindicato Médico Andaluz se hicieron propuestas concretas de actuación: cumplir lo recogido en el Plan de prevención de agresiones, en cuanto a medios disuasorios: vigilantes de seguridad, operatividad real de los botones anti pánico, campañas institucionales prestigiando a los profesionales ante la población, puesta en marcha del régimen sancionador para las agresiones no físicas despenalizadas en el actual código penal, con un respaldo absoluto y TOLERANCIA CERO ante cualquier tipo de agresión.
Finalmente se solicitó que se añadiese a los objetivos del Observatorio un registro de acciones concretas encaminadas a prevenir las agresiones, así como su impacto en términos de reducción de su casuística, si esto ocurre. Esta propuesta fue rechazada por la Consejería argumentando que “quitaría competencias a los comités sectorial y locales”. Tampoco concretó la campaña de prestigio de los profesionales que trabajan en el ámbito del SAS que anunciaron en la reunión, ni dio una fecha concreta de puesta en marcha del régimen sancionador.
Podríamos repetir el artículo publicado el 13 de marzo tras la reunión en la Consejería y que titulamos: “Otra foto más” pues sigue manteniendo su vigencia.
A pesar de todo y aun sintiéndonos decepcionados por la falta de compromiso real y efectivo de la Consejería en esta problemática tan sensible (no sólo en el papel que lo soporta todo), nosotros seguiremos trabajando en este tema, haciendo propuestas, trabajando con nuestros compañeros y animando a denunciar cualquier agresión sea física o no física buscando el objetivo que no puede ser otro que:
…TOLERANCIA CERO. LA AGRESIÓN NUNCA ES LA SOLUCIÓN…
Sindicato Médico Andaluz – Federación