Por tercera vez en la misma semana un médico de atención primaria ha sido agredido en la provincia de Sevilla: el pasado sábado 25 de marzo, un facultativo de la localidad de La Campana sufría una agresión mientras mientras atendía a la población como médico de urgencias de dicho municipio.
La delegada del Sindicato Médico de Sevilla se puso en contacto para ofrecerle ayuda y orientación en unos momentos que ningún profesional debería tener que afrontar. Según le refiere el afectado, sobre las 23:30 entró un paciente, de unos 48 años, con evidentes signos de embriaguez. Éste comenzó a proferir vejaciones e insultos hacia el facultativo mientras lo estaba atendiendo; posteriormente, abandonó el centro y a los 10 minutos volvió a entrar de forma agresiva. En esta ocasión, arremetió contra el médico, empujándolo y dejándolo caer al suelo, e intentó seguir agrediéndole físicamente. Nuestro compañero pudo defenderse y evitar así más golpes. No obstante, presenta alguna contusión provocada por la caída y el forcejeo.
Se han realizado las acciones pertinentes para denunciar dicha agresión. Por fortuna, se encuentra aceptablemente bien física y emocionalmente y, a pesar del trauma psicofísico sufrido, continúa realizando su trabajo para no menoscabar la atención de La Campana ante la dificultad actual para sustituir médicos.
Urge implementar los medios disuasorios en los centros de atención primaria. Sin personal de seguridad y sin cámaras los potenciales agresores no se ven intimidados y lo saben. ¿A qué espera la Administración?