En relación a nuestra información sobre la reactivación del nombramiento de jefes de servicio con marcado carácter político en el Hospital Virgen del Rocío, el Sindicato Médico Andaluz quiere manifestar su opinión al respecto:
Tal como ha publicado el Sindicato Médico de Sevilla en su página web, los procesos selectivos para elegir jefaturas de servicio en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla no parecen responder a la equidad y transparencia que nuestra organización viene demandando.
El Sindicato Médico Andaluz considera que estos procesos selectivos puestos en marcha por el gobierno anterior cuando estaba en funciones, debieran ser paralizados hasta tanto se publique una nueva norma de selección más ajustada a las exigencias de los profesionales.
Apoyamos por tanto lo expresado en ese artículo del Sindicato Médico de Sevilla y comunicamos que hemos enviado un escrito a la Gerencia del SAS expresándole nuestra disconformidad por estos nombramientos.
Desde hace años venimos luchando contra esta forma de gestión sanitaria y vamos a seguir haciéndolo. Creemos que los procesos selectivos deben de ser transparentes y no se pueden consentir irregularidades que hagan sospechar sobre la falta de imparcialidad.
Consideramos también que es intolerable que se sigan nombrando algunos jefes de servicio en contra de la opinión mayoritaria de sus facultativos. Escritos firmados por una mayoría aplastante no pueden ser ignorados absolutamente por la Dirección.
Queremos aclarar que no dudamos de la capacidad científico-técnica ni de la profesionalidad de nadie, pero precisamente por eso creemos que es una torpeza y una actitud inaceptable que estos procesos no se hagan de una forma más transparente.
Vamos a mantener nuestra postura y seguiremos defendiendo una forma más lógica de selección, le pese a quien le pese y gobierne quien gobierne. Creemos que los intereses de los facultativos y de la población se merecen unos procesos más garantes de equidad y más consensuados con los profesionales.
Es imprescindible actualmente una reforma de la normativa que garantice la total transparencia de estos nombramientos, así como los desvinculen absolutamente de cualquier cuestión política o de otra índole ajena a la asistencia sanitaria y a los profesionales que la ejercen.